Vía Curistoria conocemos la historia de la más famosa fotografía de Albert Einstein, convertida en icono.
Puede parecer que Albert estaba sacando la lengua cómicamente. Sin embargo ésta no es la historia de esta foto.
En realidad Einstein estaba muy enfadado y molesto. La foto fue tomada por el fotógrafo Arthur Sasse en 1951 a la salida de un homenaje al científico en su 72 cumpleaños en la Universidad de Princeton. Éste fue asediado por varios fotógrafos y tras pedir repetidas veces que parasen (¡Basta ya! – les decía) decidió estropear las posibles fotos sacándoles la lengua, sin saber que ésta estampa es la que más le representaría en la posteridad.
Más tarde Einstein, sorprendido por la imagen, pidió a Sasse nueve copias para su uso personal. Una de estas copias ha sido la subastada con el añadido de presentar una dedicatoria que Einstein escribiera para el periodista de la CBS y ABC Howard K. Smith: “Este gesto te gustará, porque va dirigido a toda la humanidad. Un civil puede permitirse hacer lo que ningún diplomático se atrevería. Tu leal y agradecido oyente, A. Einstein ‘53″.
Aquí dejo la foto original, sin recortar: